La psicología Transpersonal
“Existen 4 olas de psicología. La primera es la psicología conductista; la segunda llegó con el cognitivismo (psicoanálisis, investigación de raíces…); la tercera llegó con el humanismo (la Gestalt, el humanismo, el mundo emocional, las relaciones… y la cuarta ola es la transpersonal y dio respuestas a inquietudes muy transcendentes de un grupo de “viajeros” hacia el más allá del ego, que querían integrar toda la filosofía oriental que hablaba de un más allá del ego muy sólidamente. Los Lamas habían hecho mapas y cartografías de la consciencia muy sólidos en un mundo de la psicología y la investigación.
Dentro de la psicología transpersonal que se enseña en la Escuela Española de Desarrollo Transpersonal se integran dos pilares muy grandes que no son incompatibles:
1 – La psicología clásica, las herramientas naturales de la Persona en sus autoengaños, sus sombras, sus contradicciones y todas esa parafernalia gigantesca de sufrimientos que tiene le ser humano.
2 – La mística oriental, su trascendencia, su relativización, la identidad esencial de quien eres en realidad.
Así pues, trabajamos sobre la verdad absoluta del Nirvana y trabajamos sobre la relativa del Samsara. Trabajamos sobre el nivel de la persona y sus ajustes interpersonales y trabajamos sobre el nivel de trascendencia donde vamos adentrándonos en realidades más amplias y profundas. Trabajamos sobre una identidad pequeña de una psicología cotidiana donde uno va aprendiendo a surfear las olas del vivir y trabajamos sobre una profundidad, identidad y vía mística desde donde uno va descubriendo niveles trascendentes.
Esta es la psicología transpersonal: “Trans - Personal”. Es decir más allá de la personita y sus esquemas, como diciendo: “Hay algo más, vívelo. Muerde la manzana e investiga, experimenta.”
Y desde esa perspectiva sólo el silencio puede adentrarnos en esa investigación.”
José María Doria